Vilafranca de Bonany: Oasis para sentirse bien. Gran casa adosada con piscina

Adosado

2

Cocina completa

Ducha

2

2

2

sí

sí

sí

sí

sí

zona de tiendas, zona tranquila, Piscina, zona residencial

Semi-amueblado

1998

De calidad

1930

Casa terminada de construir

Modernizado

Calefacción central

Gas

D

Impresionante casa adosada, modernizada con cariño y lista para entrar a vivir.

Nada más entrar en la casa, queda claro que el propietario ha dado gran importancia a un ambiente de vida armonioso. Algunos detalles históricos se han combinado con estilo con el confort de la vida moderna. Por ejemplo, la cocina mallorquina, que ahora es una sala de lectura.

También se ha conservado la altura de los techos y se han colocado vigas de madera maciza.

La majestuosa superficie habitable de unos 180 m² se distribuye en 2 niveles de vivienda, que están conectados por una enorme escalera.
Hay una zona de estar en la planta baja, así como en la zona de descanso superior. Allí, una sala de relajación y TV separa los dos dormitorios. Uno de ellos tiene acceso a la terraza con vistas a la piscina y un baño en suite.

Aunque hay un amplio salón en la planta baja, el punto central es la cocina de nuevo diseño. Ofrece espacio para muchos invitados. Justo al lado se encuentra el acceso a la terraza y a la piscina (6 x 3 metros).

La parcela, plantada a la manera típica del país, es bastante manejable y ofrece acogedores rincones sombreados en verano.

Calefacción central de gas
Energía solar para el agua caliente
Puertas interiores de madera maciza
Tuberías de agua y electricidad ya renovadas
Antena SAT
Fibra de vidrio
2 chimeneas en funcionamiento
Centro urbano en Vilafranca de Bonany. Un lugar de tranquilidad y calma en el centro de la isla.

El pueblo está muy bien organizado. Actualmente tiene unos 3400 habitantes y se encuentra a unos 40 km de Palma. Todos los años se celebra allí una fiesta del melón, que atrae a muchos visitantes de cerca y de lejos. En el pasado, el pueblo se caracterizaba por las tiendas de frutas y verduras. Los coloridos puestos se podían ver desde lejos. Debido a la circunvalación de la ciudad, Vilafranca corre el riesgo de caer en el letargo.

Es el lugar ideal para las personas que quieren escapar del ajetreo de la vida cotidiana y apreciar la tranquila vida en el campo.

Si busca un cambio de ritmo en una ciudad más grande, puede llegar fácilmente a Palma y Manacor, así como al norte de la isla, a través de la autopista MA 15.

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